Cómo ayudar a los niños a afrontar noticias alarmantes
Lo que los padres pueden hacer para ayudar a los niños a procesar el dolor y el temor de manera saludable.
in EnglishLo que aprenderá
- ¿Cuál es la mejor manera de hablar con los niños sobre noticias alarmantes?
- ¿Cómo pueden los padres ayudar a los niños a sobrellevar los eventos aterradores?
Lectura rápida
Cuando ocurre una tragedia, puede ser difícil lidiar con su propio dolor y angustia al mismo tiempo que ayuda a sus hijos. Pero hay cosas que usted puede hacer para ayudar a los niños a manejar las noticias aterradoras.
No espere para informar a los niños acerca de un suceso que pudieron haber visto en las noticias. Es mejor para ellos si usted es quien les cuenta. De esta manera, podrá relatarles los hechos (aunque sean dolorosos) y establecer el tono emocional.
Anime a sus hijos a que le cuenten todo lo que hayan escuchado y hablar de cómo se sienten. Deles la oportunidad de hacer preguntas y esté preparado para compartir detalles si se los solicitan. Cuando usted anima a sus hijos a expresar sus sentimientos, también los ayuda a desarrollar habilidades de afrontamiento saludables que les servirán en el futuro.
Está bien decirle a su hijo si usted está triste, pero trate de conservar la calma. Los niños suelen asumir nuestras emociones, así que si usted está muy sensible, ellos también podrían sentirse más afectados. Esto podría dificultar que escuchen lo que usted dice.
En particular los niños pequeños pueden tener miedo de que les ocurra algo parecido. Intente tranquilizarlos al decirles que los eventos trágicos son excepcionales y que hay personas trabajando para evitar que cosas como estas vuelvan a ocurrir.
Cuando hable con sus hijos, no les dé demasiada información. En su lugar, trate de responder a sus preguntas de manera honesta y clara. Está bien si usted no puede responder a todo, lo que importa es estar disponible para su hijo. También está bien regresar al tema todas las veces que sea necesario para que su hijo logre aceptar lo sucedido.
Cuando ocurre una tragedia, los padres se encuentran ante un desafío doble: procesar sus propios sentimientos de dolor y angustia, y ayudar a sus hijos a hacer lo mismo.
Quisiera poder decirles cómo evitarles el dolor a sus hijos cuando han perdido amigos o familiares, así como el miedo cuando ocurren eventos perturbadores, especialmente cuando nos afectan de cerca. No puedo hacer eso, pero lo que puedo hacer es compartir lo que he aprendido acerca de cómo ayudar a los niños a procesar eventos perturbadores de la manera más saludable.
Como padre, usted no puede proteger a sus hijos del dolor, pero puede ayudarlos a expresar sus sentimientos, consolarlos, ayudarlos a sentirse más seguros y enseñarles cómo lidiar con el miedo. Al permitirles expresar sus sentimientos y alentarlos a que los expresen, puede ayudarlos a desarrollar habilidades saludables para enfrentar problemas que les servirán en el futuro, así como la confianza de que pueden superar la adversidad.
Darles la noticia
Cuando ocurre algo que tendrá una cobertura amplia en las noticias, mi primera y más importante sugerencia es que no se tarde en decirles a sus hijos lo que ha sucedido. Es mucho mejor para el niño si usted es quien le cuenta. Usted no querrá que se enteren por otro niño, porque lo vieron en la televisión o en un titular de periódico. Usted quiere transmitir los hechos, aunque sean dolorosos, y establecer el tono emocional.
Atender las señales de su hijo
Anímelo a decirle cualquier cosa que haya escuchado sobre la tragedia, y hablar sobre cómo se siente. Ofrézcale muchas oportunidades de hacer preguntas. Usted querrá estar preparado para responder preguntas (no sugerirlas) sobre detalles perturbadores. Su objetivo es evitar fomentar fantasías aterradoras.
Modelar la calma
Está bien hacerle saber a su hijo si usted está triste, pero si habla de manera muy emotiva sobre una experiencia traumática, es probable que su hijo absorba su emoción y no mucho más. Si por el reverso, usted mantiene la calma, es probable que su hijo capte lo que es importante: que los eventos trágicos pueden trastornar nuestras vidas, incluso de manera profunda, pero podemos aprender de las malas experiencias y trabajar juntos para hacernos más fuertes.
Tranquilizarlos
Hablar acerca de la muerte siempre es difícil, pero un accidente trágico o un acto de violencia es especialmente complicado debido a lo egocéntricos que son los niños: es probable que se enfoquen en la probabilidad de que algo así les pueda pasar a ellos. Así que es importante tranquilizar a su hijo acerca de lo inusuales que son este tipo de eventos y las medidas de seguridad que se han tomado para evitar que les ocurran cosas como estas a ellos. También les puede asegurar que este tipo de tragedias se investigan cuidadosamente para identificar las causas y ayudar a evitar que vuelvan a ocurrir. Saber que aprendemos de las experiencias negativas ayuda a los niños a desarrollar la confianza.
Ayudar a los niños a expresar sus sentimientos
En su conversación (y en las siguientes) puede sugerir maneras en las que su hijo podría recordar a aquellos a quienes ha perdido: hacer dibujos o escribir sobre las cosas que hicieron juntos. Si usted es religioso, ir a la iglesia o sinagoga puede ayudar.
Tomar en cuenta la etapa de desarrollo de los niños
No ofrezca demasiada información, ya que esto podría ser abrumador. En su lugar, trate de responder las preguntas de su hijo. Haga lo mejor posible por responder con honestidad y claridad. Está bien si no puede responder todo: lo importante es estar disponible para su hijo. Las conversaciones difíciles como esta no se agotan en una sola sesión. Lo más probable es que tenga que volver al tema tantas veces como su hijo lo necesite para aceptar esta experiencia.
Estar disponible
Si su hijo está afectado, pasar tiempo con él puede hacer que se sienta más seguro. Los niños encuentran gran consuelo en las rutinas, y hacer cosas juntos en familia puede que sea la manera más efectiva de sanar.
Honrar la memoria de quienes se han ido
Hacer dibujos, sembrar un árbol, compartir historias o liberar globos pueden ser formas buenas y positivas de ayudar a que un niño haga un cierre de la situación. Es importante hacerle saber a su hijo que una persona sigue viviendo en los corazones y las mentes de los demás. Hacer algo para ayudar a otras personas que lo necesiten puede ser muy terapéutico: puede ayudar a que los niños no solamente se sientan bien con ellos mismos sino que aprendan una forma saludable de responder al dolor.